¿Tus finanzas personales no van muy bien y no paras de endeudarte? ¿Tienes una empresa y necesitas reemprender para mejorar tu flujo de caja? Entonces debes darle un vistazo a la ley de insolvencia o Ley Nº 20.720.
Te explicaremos con detalle cómo puedes lograr renegociar o reestructurar tus deudas mediante el marco legal vigente en Chile. También te diremos los requisitos que debes cumplir y los compromisos que necesitas adquirir para lograr el objetivo de empezar de cero y sin deudas.
¿ Qué es la ley de insolvencia?
La ley de insolvencia y reemprendimiento es un procedimiento que permite a personas naturales, pymes y grandes empresas negociar sus obligaciones mediante un convenio con el sector financiero y con los acreedores.
Básicamente, permite llegar a un acuerdo con las personas y organizaciones a las que se les debe dinero. La ley tiende puentes para llegar a una solución con los acreedores o por vía de la liquidación del patrimonio.
La idea no es hacer borrón y cuenta nueva en el sentido estricto, porque las deudas estarán ahí. Sí permite varias cosas, entre ellas, declararse insolvente para salir de los compromisos y pagarlos.
Ciertos beneficios financieros y legales facilitan este proceso para sanear la vida financiera y darse un respiro.
¿Cómo se llega a la insolvencia económica?
Cuando decimos que una persona, negocio o empresa es insolvente queremos decir que sus activos – o la suma de todas las cosas que tiene- no son suficientes para abarcar el total de sus pasivos, es decir, lo que debe.
Si a esto se agrega una crisis por falta de liquidez o de dinero en mano para cumplir con las obligaciones y gastos, entonces lo más seguro es que serán escasas las salidas para dejar atrás las deudas.
Si esta es la situación y no hay manera de volver a la normalidad como deudor que paga a tiempo, es el momento de declararse insolvente. Es este el panorama que a grandes rasgos resuelve la Ley Nº 20.720 o ley insolvencia para mejorar las finanzas personales y las de las empresas en Chile.
¿Quiénes se pueden acoger a la ley insolvencia?
La Ley de Reorganización y Liquidación de Activos de Empresas y Personas, mejor conocida como la Ley Nº 20.720 o de insolvencia, está vigente en Chile desde el año 2014.
Permite a las personas naturales y empresas de todos los tamaños, que atraviesan por una situación financiera crítica, recuperarse de su estado de endeudamiento y reemprender.
¿Cómo se puede lograr esta recuperación y reemprendimiento? Mediante varias herramientas aprobadas legalmente y que brindan soluciones a los siguientes grupos:
- Personas naturales
- Microempresas y Pymes
- Grandes empresas
- Personas jurídicas sin fines de lucro
La ley de insolvencia y reemprendimiento permite a las personas naturales en situación de incapacidad para pagar, a que accedan a modos legales para renegociar sus deudas y/o pedir que se liquiden sus bienes para solventar lo que deben.
En el caso de las empresas, las leyes plantean recursos para que las organizaciones puedan reorganizar sus deudas o aceleren la liquidación de sus patrimonios.
Recursos que ofrece la Ley 20.720
La ley de insolvencia pone a disposición de las personas y empresas algunas herramientas y alternativas para responder a situaciones agravadas en materia financiera o económica.
Para las empresas:
- La norma legal contempla instrumentos que sirven de tabla de salvación para emprendimientos con buenas posibilidades de seguir en el tiempo y de saldar sus deudas.
- Otro recurso es facilitar la liquidación de los bienes de las empresas que no tienen oportunidades de recuperarse.
Para las personas:
- La normativa permite que las personas comunes puedan renegociar sus deudas. Ello con mejores formas para pagar y con un sistema nuevo para la cancelación de estos compromisos de dinero.
- Otra forma es la liquidación de los bienes a través de una venta rápida y planificada que le permita saldar las cuentas y superar la crisis.
Todos los trámites en el marco de la ley insolvencia son gratuitos.
La ley de insolvencia en cifras
Solamente en el año 2020, según estadísticas de la Superintendencia de Insolvencia y Reemprendimiento de Chile, exactamente 1.827 empresas se acogieron a la ley de insolvencia. Más que todo, por la situación desatada por la COVID-19.
Esto representa un crecimiento de 11% con respecto a 2019, año en que la crisis social subió el número de cierre de firmas o empresas.
De las 1.827 empresas que se declararon en quiebra:
- El 51% (933 casos) son organizaciones de profesionales y sociedades empresariales que emiten boletas de honorarios de servicios.
- El 13% (233 casos) corresponde a pequeñas empresas, seguidas por 115 medianas empresas y 111 microempresas
- Por sectores productivos, estos cierres por quiebras o insolvencias afectaron a comercio y servicios, empresas de reparación de vehículos, construcción, ejercicio de actividades profesionales y técnicas, salud y servicios de asistencia social.
- También hay que considerar el impacto del desempleo en empresas y personas, lo cual hace más difícil el reemprendimiento si no se pueden limpiar los antecedentes como deudores y no entra dinero fresco.
¿Cómo pedir la renegociación de deudas si eres persona natural?
Para muchas personas y empresas, buscar abogados deudas puede marcar un buen punto de inicio para resolver la situación de insolvencia económica.
Sin embargo, también puedes iniciar la petición por tu propia cuenta, siguiendo estos pasos y sin pagar nada. Aunque no podemos olvidar que una asesoría profesional o un seguimiento por alguien experto nunca estará de más.
La renegociación de las deudas de una persona natural es un trámite administrativo que es absolutamente voluntario y sin costo. Nadie puede presionarte para ello, a menos que ya la situación de agobio por las deudas sea intolerable para ti.
¿Qué debes hacer para renegociar tus deudas y lograr mejores condiciones de pago o la venta de tus bienes para cancelar estos compromisos?
Primero debes pedir a la Superintendencia de Insolvencia y Reemprendimiento (Superir), que actúe como facilitador de estos convenios de pago.
La idea es que deudores y acreedores puedan hallar un esquema que funcione para ambas partes. Desde la página oficial de la Superir puedes realizar esta petición a cualquier altura del año.
¿Cómo sé si califico para pedir renegociación de deudas?
Pueden solicitar la renegociación de las deudas, así como más plazos de pago, menores tasas de interés o mejores acuerdos, todas las personas que califiquen como deudoras:
- Personas que no hayan podido emitir boletas de honorarios en los últimos 2 años.
- Personas en la clasificación de contribuyentes de primera categoría. Esto de acuerdo a lo que establece el Servicio de Impuestos Internos (SII).
Entre los requisitos que deben cumplir se encuentran:
- Tener dos o más deudas que expiraron por más de 90 días corridos y con apremio de pago.
- Estas deudas deben venir de raíces diferentes y superar las 80 unidades de Fomento (UF).
- Dichas obligaciones o deudas no pueden haber sido objeto de demanda de liquidación forzosa o estar en juicio. Puedes verificar este estatus con tu RUN y salir de dudas sobre si tienes alguna causa en el Poder Judicial.
Si reúnes estos requisitos, puedes iniciar la petición en línea desde la web Chile Atiende. Para ello necesitarás tener activa la ClaveÚnica.
Documentos requeridos para el proceso de renegociación
Para activar el proceso concursal de renegociación, que es como se le denomina a este procedimiento, deberás superar tres audiencias. Estas permitirán determinar el pasivo, cómo se llevará la renegociación y cómo será ejecutado.
Para ello, debes iniciar la petición presentando todos estos papeles de forma obligatoria:
- Declaración jurada con la lista detallada de las deudas.
- Declaración jurada que de fe de la condición como persona deudora.
- Carta con la propuesta de renegociación.
- Fotocopia de la cédula de identidad por ambas caras, del deudor, deudora, apoderado o representante.
- Declaración jurada donde consten todos tus ingresos y documentos que los respaldan.
- Certificado de cotizaciones por previsión social del último año.
- Declaración jurada con la lista de bienes. Especifica cuáles no se pueden embargar de acuerdo con las leyes, prohibiciones y gravámenes.
- Certificado matrimonial (si aplica).
- Declaración jurada que asiente que no se ha recibido demanda de liquidación o juicio que no sea laboral.
- Documento que respalden las evidencias de que se tienen deudas, cuáles están vencidas, etc.
- Informe de deudas. Lo emite la Comisión para el Mercado Financiero (CMF)
- Certificación de morosidad (Boletín Comercial)
Hay otros documentos que podrán solicitar y que puedes ver en el portal de Superir o en ChileAtiende.
Ten en cuenta que estas declaraciones juradas siguen un modelo ya establecido por el Superir. No debes usar otro modelo para iniciar el procedimiento concursal de renegociación. En la web de la superintendencia lo consigues y en el enlace que ya te suministramos.
También hay una guía de apoyo que te facilitará mucho más este proceso. No es necesario que las declaraciones juradas cuenten con el aval del notario público.
¿Cómo hago el trámite en línea?
Puedes iniciar el proceso concursal de renegociación en línea con tu ClaveÚnica, o presencial, en las oficinas de la Superir.
- Si es online, entra a “ir al trámite en línea” desde la web de la Superir o desde ChileAtiende.
- Escoge el botón “iniciar procedimiento concursal de renegociación”.
- Introduce tu RUN y clave.
- Adjunta los documentos.
- Una vez enviados todos los papeles, dale a “finalizar”.
- Recibirás un comprobante del ingreso de tu petición.
- En 5 días hábiles podrán emitirte un anuncio de que fuiste admitido en el Boletín Concursal, siempre que los documentos estén en regla.
Con el Boletín Concursal, las personas a las que les debes no podrán demandarte ni exigir liquidación forzosa. Tampoco, acumular más intereses por mora.
La ley de insolvencia también permite solicitar la liquidación rápida y voluntaria de bienes de la persona deudora. Aun así puede tardar un año. Para este procedimiento se requiere la intervención de un abogado o abogada.
¿Cómo pedir la reorganización de la deuda en caso de empresas?
La ley de insolvencia permite a las empresas deudoras y profesionales que emitan boletas de honorarios acogerse a la ley 20.720.
Así pueden iniciar más fácilmente el procedimiento judicial para negociar con los acreedores o pedir el cierre formal y la liquidación voluntaria de los bienes.
La idea del procedimiento concursal de reorganización o liquidación voluntaria es:
- Conseguir nuevos plazos para que los pagos sean más flexibles
- Lograr remisiones de deudas
- Cambiar los acuerdos de ciertas obligaciones
- Incorporar la figura de veedor que busque los acuerdos entre deudores y acreedores. Este veedor es una persona natural fiscalizada por la Superintendencia.
Acogerse a la ley 20.720 para la liquidación voluntaria permite hacer un cierre formal de una empresa y facilitar la entrega de los bienes liquidados a los acreedores.
¿Qué empresas pueden solicitar la reorganización?
Este trámite se puede pedir a cualquier altura del año, siendo 4 meses el promedio del plazo legal para llegarse a un acuerdo de reorganización de la empresa endeudada.
Pueden solicitarlo:
- Personas jurídicas de derecho privado que ejerzan sus actividades con o sin intenciones de lucrarse.
- Personas naturales que tengan la calificación de contribuyentes de primera categoría de acuerdo con el SII.
- Personas naturales contribuyentes que ejerzan libremente su profesión y emitan boletas de honorarios (de acuerdo con el artículo 42 número 2, Ley de Impuesto a la Renta).
Pasos a seguir por una empresa para reorganizar sus deudas
- La empresa deudora debe solicitar a un tribunal civil su voluntad para la reorganización de las deudas.
- Esta solicitud se hace usando un modelo que está disponible en los tribunales, en las sedes de la Superir o en el sitio web de la Superir.
- Debe ser asistido por un abogado o abogada, quien pedirá un veedor y entregará los documentos necesarios, como la auditoria de las deudas.
- La nominación de la figura del veedor es obligatoria. La Superir dará un certificado que se enviará al tribunal de competencia.
- El tribunal dará su resolución de reorganización para ser publicado en el Boletín Concursal.
- Con esta resolución, la empresa o el profesional de libre ejercicio puede contar con protección financiera concursal por 30 días, mientras se establecen las reuniones con los acreedores y se llegan a acuerdos.
- Durante este tiempo, no podrán activarse juicios ni solicitar liquidaciones contra la empresa que tiene la deuda. Tampoco gravar o enajenar activos.
Documentos que deben consignarse
Entre los documentos y antecedentes que deben ser entregados para pedir la reorganización de las deudas de una empresa se encuentran:
- Relación de todos los bienes de la empresa deudora, incluso los bienes de terceros dados en garantía.
- Certificado de un auditor independiente para determinar los pasivos. Debe estar acreditado por la Comisión para el Mercado Financiero (CMF).
- Relación de sus juicios pendientes.
- Estado de las deudas, incluyendo los datos para contactar a los acreedores.
- Nómina completa de trabajadores y trabajadoras con datos contractuales, prestaciones laborales y previsionales que se deben.
- Balance de contabilidad completo correspondiente a su último ejercicio.
- Balance provisorio con datos financieros y contables con cierre inferior a 45 días anteriores a la entrega de la solicitud.
La solicitud de la apertura del procedimiento concursal de reorganización es gratuita para las empresas deudoras. No se puede hacer en línea.
¿Cómo es la liquidación voluntaria de los bienes?
Para pedir la liquidación de los bienes de una empresa deudora existen dos recursos:
- Por liquidación voluntaria, donde la empresa entrega su solicitud en el marco de la ley de insolvencia.
- Por liquidación forzosa, donde el acreedor introduce una demanda contra la empresa deudora.
Puedes solicitar la activación de la liquidación voluntaria bajo la ley de insolvencia si reúnes los requisitos de personas naturales y jurídicas.
Son los mismos que si pides la reorganización, es decir, contribuyentes de primera categoría, personas jurídicas de derecho privado y personas naturales en libre ejercicio (siempre que emitan boletas de honorarios).
Ventajas de la Ley de Insolvencia
Hay ventajas innegables de la ley insolvencia para las empresas y personas naturales:
- Ayuda a proteger a las Pymes del efecto dominó por la caída productiva. Esto es clave porque el 70% de los puestos de trabajo en Chile son aportados por las pymes.
- Permite abrir procedimientos concursales, así como repactar las deudas con los acreedores o simplificar la liquidación de una compañía.
- Hace posible negociar deudas de forma colectiva, con planes de pago y lograr meses de gracia.
- Con una liquidación, se puede reiniciar desde cero, ya que se extinguen todas las deudas que no se pudieron cubrir con los activos pertenecientes a la persona natural o empresa deudora.
- Todo el proceso se puede hacer de manera ordenada, con menos complejidad, ya que los juicios de cobro se unifican.
- Ayuda a las personas y empresas endeudadas a recuperarse en el plazo más corto posible.
Conclusión
Te contamos todo lo que debes saber sobre la ley de insolvencia en Chile y no queremos concluir sin darte tres recomendaciones claves para prevenir el endeudamiento:
- Evita pedir préstamos personales o informales para saldar las deudas de tu empresa.
- Actúa a tiempo para reducir las insolvencias que puedan llegar a futuro.
- Céntrate en cubrir los costos fijos y evalúa los riesgos de no pagarlos a tiempo.
¿Necesitas hacer trámites relacionados con la ley de insolvencia? ¿Te piden declaraciones juradas o firmar documentos con firma electrónica? Recuerda que FirmaVirtual es la mejor manera para firmar online y sin salir de casa los documentos que necesitan de tu firma.
Conoce todas las ventajas de tener una firma virtual y revisa nuestra sección de preguntas frecuentes para que le saques provecho a esta herramienta.
Contáctanos por los teléfonos +569 4522 7304 y +569 7563 5393 y si te gustó este contenido, te invitamos a que sepas más sobre cómo sacar tu firma electrónica en Chile o conocer el paso a paso de cómo cambiarte de AFP.